Reclamar facturas antiguas
Reclamar facturas antiguas supone que es probable que no puedas reclamar tu deuda. Todas las deudas, tiene un plazo de prescripción, esto supone que tienes un plazo para poder reclamarla y ese plazo va a depender del tipo de deuda que sea.
Por ejemplo, con la deudas periódicas, por ejemplo, alquileres o arrendamientos, pensiones de alimentos, etc. el plazo es de 5 años, con deudas de servicios profesionales, el plazo es de 3. El plazo general actual de las deudas es de 5 años. Este plazo ha cambiado recientemente (Ley 42/2015, de 5 de octubre de reforma de la Ley 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil), por ello hay un periodo de transición para deudas que se originaron antes del 2015.
Lo único que puedes hacer para que el plazo de prescripción se paralice, es reclamarle la deuda al deudor. Para ello, reclámale de forma que luego lo puedas acreditar, es decir, que puedas demostrar que te has puesto en contacto con el deudor y le has pedido lo que te debe. La mejor forma de hacerlo es mediante un burofax.
De todas formas, te recomendamos que consultes con un abogado para que pueda examinar tu documentación y darte su visión del caso.